GUIÓN













DULCE  SUEÑO  DE  SOMBRAS 

Escrito  Por:

Jesús  Graván  Sánchez







       Basado  en  una  historia  real








INT.DORMITORIO  DE  UN  NIÑO-NOCHE

Estamos en el dormitorio de un NIÑO. Éste se encuentra en la cama, debajo de las sábanas. Podemos ver una pequeña luz, que al parecer es de un móvil. Está acongojado. Podemos escuchar los sonidos de angustia que emite. Seguidamente, escuchamos su voz mientras permanece debajo de las sábanas:

NIÑO
(Afligido)
¿Mamá?

MADRE

(Voz telefónica. Se muestra muy cariñosa)

Sí, Hola mi amor ,¿Qué pasa? ¿Qué haces a estas horas levantado, cariño mío?

NIÑO

(En un tono muy mimoso a la vez que con miedo)

Mamá, estoy solo, tengo miedo. ¿Por qué no vienes?

MADRE

(Quitándole importancia) ¿Cómo qué estás solo? ¿No está Papá en casa?

NIÑO
(Un  poco  más  calmado)
Sí.

MADRE
¿Entonces?

NIÑO
(Sigue  angustiado)

Pero no está aquí. Y he escuchado un ruido muy raro.

MADRE
¿Un  ruido?  ¿Qué  ruido?

De  repente,  escuchamos  un  fuerte  crujido.

NIÑO (Muy asustado)

Lo ves, mamá, otra vez. Ven aquí por favor.

2.


MADRE

Vale, vale, tranquilízate. No va a pasar nada, ya verás. Mamá te va a ayudar, ¿de acuerdo?

NIÑO
(Mimoso  y  un  poco  angustiado)
Sí.

MADRE
¿Has  encendido  la  luz?

NIÑO
No.

MADRE
Pues,  anda,  hazlo.

El niño sale de debajo de las sábanas pero muy lentamente y con mucho miedo. Mira hacia ambos lados de la habitación. Vemos que está con el pijama puesto y tiene unos 7 u 8 años. Se sienta sobre la cama e intenta encender rápidamente el interruptor de la lámpara de la mesita de noche con la mano que no tiene ocupada por el móvil. Lo acciona dos o tres veces, pero no funciona, así que vuelve a introducirse debajo de las sábanas.

NIÑO

(Vuelve a estar más angustiado)

No se enciende, Mamá. No se enciende(Resopla con un poco de rabia).

MADRE (Cariñosa)

Bueno, mi amor, no te preocupes, no pasa nada, se habrá fundido la bombilla.

NIÑO ¿Qué hago, mamá?

MADRE
(Tono  esperanzador)

Sal de tu habitación y busca a Papá, corre, que él te va a ayudar.

NIÑO

¿Y si cuando salga me encuentro con un ladrón?

3.

MADRE

No, no va a pasar nada, ya verás. Hubiera saltado la alarma. ¿Tú has escuchado la alarma?

NIÑO
No.

MADRE

Pues entonces, no tienes nada que temer. Levántate.

El niño sale de nuevo de debajo de las sábanas con bastante miedo y cautela. Se baja de la cama. Está descalzo. Corre invadido por el miedo hacia la puerta con el móvil en la mano. Por el camino, su pie tropieza con una pata de la cama y cae al suelo. El móvil se le escapa de las manos y se aleja unos metros deslizándose por el suelo. Comienza a llorar. Escuchamos la voz de la madre por el móvil, aunque más distante que antes.

MADRE
(Nerviosa)

¿Qué  te  pasa,  hijo?  ¿Qué  ha  pasado?

Nadie contesta. El miedo aparece por primera vez en la voz de la madre.

MADRE(CONT) (Muy preocupada)

Hijo, por favor, ¿Estás bien? ¡Contesta!

NIÑO (Llorando)
Me  duele,  mamá,  me  duele.

MADRE

(Muy preocupada, pero aliviada al escuchar la voz de su hijo)
¿El  qué,  el  qué  te  duele,  hijo?

NIÑO

(Un poco más calmado, pero gimoteando)

El pié. Me duele el pié, mamá. He tropezado con la cama.

MADRE (Suspira)

Vale, vale. Tranquilo, no pasa nada mi amor. Frótate fuerte, verás como se te alivia.

4.



El niño se sienta en el suelo y comienza a frotarse hasta que se calma y deja de gimotear.

MADRE ¿Estás mejor?

NIÑO

MADRE

Vuelve a coger el móvil, anda, que te escucho muy flojito.

El  niño  se  levanta  más  calmado  y  coge  el  móvil.

NIÑO
(Con  el  móvil  en  la  oreja)
Ya.

MADRE

Pues venga, abre la puerta y busca a Papá.

El niño llega por fin hasta la puerta y acciona el pomo, pero ésta no se abre.

NIÑO

(Angustiado otra vez mientras intenta abrir la puerta)
No  se  abre,  mamá.  No  se  abre.

MADRE

Prueba más fuerte a ver si está atascada.

Lo intenta con más fuerza, pero nada. Se pone otra vez el móvil en la oreja para hablar. Está muy angustiado.

NIÑO

(Otra vez se ha apoderado de él el pánico)

No, no se abre, Mamá. Me han encerrado aquí. ¿Qué hago?

MADRE

Vale, tranquilo, no pasa nada. Nadie te ha encerrado. Vamos a esperar que se haga de día, verás como Papá te abre por la mañana, ¿vale? Vuelve a la cama. Yo estoy aquí contigo, no te va a pasar nada.

5.



El niño vuelve a la cama con lágrimas en los ojos mientras continúa escuchando a la madre.

MADRE(CONT)

Venga, acuéstate, tápate que yo estoy aquí.

El niño deja el móvil sobre la mesita de noche. Se acuesta, se tapa hasta el cuello y coge de nuevo el móvil.

MADRE(CONT) (Tono alegre)
¿Quieres  que  te  cuente  un  cuento?

NIÑO
(Triste)
Sí.

MADRE ¿Cuál quieres?

NIÑO
(Con  un  poco  de  alegría)
El  que  me  contabas  siempre,  mamá.

MADRE
¿El  de  las  sombras  en  la  pared?

NIÑO
Sí.

MADRE

Vale, pero tendrás que hacer magia para que se vean. ¿Tú sabes hacer magia?

El  niño  sonríe  y  dice  que  sí.

MADRE(CONT)

Vale. Pues mira hacia la pared y concéntrate. ¿Estás preparado?

El niño se acuesta de lado y se concentra en la pared que tiene a su derecha.

NIÑO
Sí.

La madre comienza a contarle el cuento a través del teléfono.

6.


MADRE

Todos los miércoles, Alvarito iba a casa de su abuela. Con ella se lo pasaba en grande. Siempre se inventaba un montón de juegos divertidos y, además, siempre le preparaba un pastel de manzana riquísimo...

El niño mira hacia la pared, pero no hay ningún reflejo de sombras.

NIÑO (Desilusionado)
No  sale  nada,  Mamá.

MADRE (Sorprendida)

¿No? ¿Qué raro? A lo mejor es porque no hay suficiente luz. Abre un poco la persiana para que haya más claridad.

El niño deja de nuevo el móvil sobre la mesita de noche. Se levanta y sube un poco la persiana. Inmediatamente, entra un flujo de luz procedente de la luna llena. De repente, el reflejo de algo moviéndose fuera, asusta al niño y éste da un salto hacia atrás a la vez que emite un grito seco al caer al suelo de nuevo. Rápidamente se levanta y vuelve a introducirse debajo de las sábanas de la cama. El móvil se ha quedado en la mesita de noche. Escuchamos la voz de la madre que se encuentra asustada tras el grito que ha oído.

MADRE(CONT)

¿Qué te ocurre? ¿Estás bien, mi amor? ¿Qué ha pasado?

El niño no contesta. Podemos escuchar su respiración acelarada por el miedo.

MADRE(CONT) (Más nerviosa)

Cariño, ¿dónde estás? ¡Contesta, que me estás asustando!

El  niño  sigue  aterrorizado  bajo  las  sábanas.

MADRE(CONT)

(El nerviosismo y la angustia se van apoderando de su voz hasta casi el llanto)

Nene, nene ¿Dónde estás? ¡Contesta, por favor! ¿Qué te ha pasado?

7.



El niño asoma la cabeza sin llegar a destaparse del todo. Con una mano atrapa rápidamente el móvil de la mesita de noche y se esconde de nuevo.

NIÑO
(Voz  temblorosa)
Estoy  aquí,  Mamá.  Estoy  aquí.

MADRE

(Contenta, pero enfadada) ¿Qué ha pasado? ¿Por qué no contestabas?

NIÑO
Es  que  había  algo  ahí  fuera.

MADRE ¿Algo? ¿El qué?

NIÑO
No  lo  sé,  no  lo  he  visto.

MADRE
(Complaciente  y  cariñosa)

¿Y para eso tanto susto? Seguro que era el gato, tonto. ¿Has subido la persiana?

NIÑO (Más calmado)
Sí.

MADRE ¿Seguimos con el cuento?

NIÑO

(Algo más aliviado) Vale, mamá.

El niño se destapa un poco y fija su mirada otra vez sobre la pared. La madre continúa contándole el cuento.

MADRE

Aquel miércoles, la abuela tuvo que salir a hacer la compra y dejó a Alvaro solo. Le advirtió que no hiciera travesuras y que no tocara el viejo sombrero que estaba encima de la cómoda. Naturalmente, lo primero que hizo en cuanto la abuela salió por la puerta, fue coger el sombrero y ponérselo. En ese preciso momento, comenzó a oír

(MÁS)

8.



MADRE (continúa) ruidos que venían del piso de arriba, de la habitación de la abuela.

LA VOZ DE LA MADRE SE VA SILENCIANDO POCO A POCO HASTA QUE ESCUCHAMOS SÓLO UN SUSURRO. COMIENZA A SONAR UNA MELODÍA ALEGRE, PERO MELÓDICA mientras dice:

MADRE

Alvarito subió los escalones rápidamente y entreabrió la puerta con cuidado...

DEJAMOS DE ESCUCHAR DEFINITIVAMENTE LA VOZ DE LA MADRE, MIENTRAS SE INTENSIFICA EL SONIDO DE LA MÚSICA.

El niño tiene su mirada fija sobre la pared. Poco a poco apreciamos que van apareciendo una serie de pájaros de sombras que se mueven de un lado a otro sobre la pared. Cuando hacen su aparición, la ilusión se desborda en el rostro del niño.

SU IMAGINACIÓN HACE QUE VEAMOS A LA MADRE(33), QUE APARECE POCO A POCO A SU LADO SENTADA SOBRE LA CAMA. Está leyendo un cuento de sombras que tiene entre las manos. El niño escucha y observa muy atento. El cansancio va cerrando sus ojos mientras observa las sombras en la pared alternándose: un barco que navega racheando entre las olas, un hombre comiendo en un gran festín y una lechuza posada sobre un árbol... Poco a poco el sueño logra vencerle. Es un dulce sueño de sombras.

VEMOS A LA MADRE DÁNDOLE UN BESO EN LA FRENTE CON CARIÑO, mientras lo arropa. Luego, ésta, desaparece lentamente como si fuera un espejismo.

LA IMAGEN del niño en la cama se va alejando hasta que sale de la habitación y vemos la puerta cerrada por detrás.

CORTA  A:


INT.  DORMITORIO-NOCHE

La madre sujeta su móvil entre las manos mientras llora. A su lado duerme otro hombre. Seguidamente, se seca las lágrimas y comienza a marcar un número. Su mano tiembla. Su rostro ha pasado a reflejar rabia.

ENCADENA  CON:

9.


INT.  SALÓN-NOCHE

Un móvil que se encuentra vibrando y parpadeando sobre una mesa.

En el sofá hay un HOMBRE de unos 30 años. Parece que está dormido, pero enseguida podemos ver que el gesto de su mejilla expresa placidez y que sobre la mesa hay una jeringuilla y una cuchara.

En  el  suelo  podemos  ver  un  vaso  roto  en  mil  pedazos.

Estamos en el salón de una casa. Todo está bastante desordenado y sucio.

LA CÁMARA se dirige hacia una puerta que da al salón. Está cerrada. Es la misma que vimos antes.

TÍTULOS  DE  CRÉDITO.

                              FIN.

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